- El Gobernador interino por oficio del 13 del corriente, hace saber que en el próximo correo responderá sobre la provisión de yerba.
- Por otro oficio dicho mandatario, queda enterado de la asunción del Regidor Juan Francisco Roldán.
- Mediante pedimento los vecinos de Coronda solicita se informe al Virrey sobre “los muchos vagos y ladrones que infestan aquellos campos”, proponiendo el “modo de extinguirlos”. Se dispone agregar el pedido al expediente obrado sobre esta materia y pasarlo al Procurador General.
- El Alguacil Mayor informa que mandó reconocer el calabozo habiéndose comprobado que uno de ellos está por venirse abajo por tener los tirantes quebrados y un puntal vencido. Solicita se le indique un lugar para trasladar con seguridad, los presos. El cuerpo resuelve que se pongan nuevos puntales y que el pedimento con todos los antecedentes de este asunto, se traslade al Procurador General.
- A su pedido, se concede de merced a María Antonia Frutos, medio cuarto de solar que se halla “inmediato a la capilla de San Antonio”.
- El Procurador General, en respuesta a la vista que se le dio del expediente iniciado para el establecimiento del Hospital, hace presente que resulta del alcance $ 229 y 2 y cuartillo real, y de principal y réditos reunidos $ 5137 y 4 reales y solicita se proceda a la cobranza de los réditos vencidos. Se ordena al Escribano tomar dicha cuenta, hasta diciembre de 1788, para determinar. Mediante pedimento, Lucas de Echagüe y Andía solicita tomara censo del 5 por ciento $ 500 del noveno y medio del hospital, para cargo seguro ofrece la hipoteca de su casa. Se reserva el pedido, hasta que se determine esta materia. Por oficio, Martín Francisco de Larrachea, electo Juez Pedáneo del distrito que corre desde Santo Tomé, por el Salado, al Norte, expone que para poder ejercer necesita el auxilio de 4 soldados de la Compañía de Blandengues, que alojaría en su estancia. Como el cuerpo carece de facultad para acceder al pedido, y se estima que el Comandante de Armas tampoco la tiene, se resuelve elevar la solicitud al Virrey. A propuesta de Alcalde 1º se declara que las facultades de los jueces Pedáneo son las siguientes: “cuidar, celar y vigilar” la persecución y exterminio de ladrones y “gente perniciosa”, remitiéndolos a cualquiera de los juzgado ordinarios, con su parte de sus delitos y depositando sus bienes en vecinos, hasta su embargo. En caso de que los delitos sean leves y de poca consideración, los podrá desterrar, remitiéndolos al establecimiento que el Virrey determina; 2º) Evitar los juegos sin excusa la más leve falta, porque cotos “tan perniciosos entretenimientos” son los que provocan los mayores desórdenes que terminan con pendencias y heridas mortales;3º) Cuidar que en todos los establecimientos se hagan sementeras y labranzas a fin de que tengan su sustentación y no están ocupados en ejercicios prohibidos y perjudiciales, 4º) Impedir la compra y extracción de hacienda sin las debidas licencias, pases y guía, reteniendo los animales de los infractores y dar cuenta al Alcalde 1º, 5º) Cuidar que no haya amancebamientos “ni otros desórdenes en ofensa de Dios, y de la Patria y República”, y advertir a los que no cumplen con los preceptos de la Iglesia, que “harán reos de Dios por su omisión”; 6º) Impedir la recogida de hacienda sin la licencia pertinente o suya. En tal caso, ordenará a los hacendados que concurran a aportar sus animales, separando los ovejunos y de marcas no conocidas, los que pondrá a disposición del Cabildo; 7º) Capturarán a “todos aquellos vagos y gente ociosa” y a los que comentan “muertes, robos y otros insultos de gravedad”, remitiéndolos a los juzgados ordinarios. 8º) En razón de la gran distancia a esta ciudad, tendrán facultad para oír demandas verbales “hasta la cantidad de doce pesos”. Todas estas facultades, sin perjuicio de los que poseen los Alcalde de la Hermandad. El cuerpo designará dichos jueces, anualmente, o por el tiempo que estime conveniente. Julián Alzugaray y Francisco (Javier de la Cruz) Suero asumen como Jueces Pedáneos.
- Respecto de informe que ordena el Virrey, por oficio del 9 de marzo, ante las propuestas del Comandante de Armas, 1º expone: que es necesario trasladar el fuerte de San Nicolás 4 leguas más al norte, y el de San Juan Bautista 10 o 12 en el mismo rumbo, que es preciso aumentar en 25 plazas las 100 que componen la dotación de Blandengues, a cubrirse con los Arbitrios; que solamente se “condecora” al Capitán de dicha Compañía, con el título de “Comandante de los vagos”, para establecer a éstos en las inmediaciones de los fuertes, y a los indios de Santiago, en el fuerte de San Nicolás, donde se hallan, y que no se haga novedad en la dependencia de las Milicias, que deben continuar a la orden del Comandante de Armas; que es conveniente reunir a las “familias vagas” en la frontera, alrededor de algún fuerte, como lo han representado los vecinos de Coronda y del Salado, por los perjuicios que causan a sus ganados; que se socorra a los mencionados indios con vacunos y laneras para su manutención y vestuario, proponiendo que en lugar de suministración una res diaria, como se hace desde 3 años por orden de la Superintendencia, se les forme una estancia, con vacunos y lanares de cría, a fin de mantenerse “con los multíplices” y evitar que el gasto prosiga; que los costos de “refacción, construcción y traslación de los fuertes”, se haga como siempre, con los Arbitrios; que se repare de San Javier por estar arruinado, desistir de la propuesta de mudar el fuerte de San Juan Bautista al Arroyo de las Ovejas, sito 34 leguas a norte de la ciudad, por lograr distancia, y no ubicar ninguno en dicho lugar ni en el paraje de Cayastá, por ser de mala guarda y “piso enfermizo”, sito en donde se estableció, en pueblo, los chascomúes en 1749. El Alcalde 2º y el Alguacil Mayor difieren su parecer para mejor informarse, proponiendo citar para este asunto, al Regidor Juan Francisco Roldán. El Alcalde de la Hermandad de Coronda por oficio del 1º del corriente, remite la lista, firmada, de los vecinos que han ofrecido su contribución para la creación de la nueva población que han propuesto, que incluya 4 de la ciudad, que son hacendados del partido. Se dispone elevarla al Virrey, junto con las demás actuaciones de la materia. En la visita de Cárcel se hallaron los siguientes presos: José Antonio Andino y Melchor Lares, por muerte de Bernardino Abalos; Juan José González, por ladrón; Sebastián Martínez, por camorrero; Salvador Cayuri, por muerte; Juan Antonio Gaona por adulterio; Calixto Basualdo y Pedro Leyva, por heridas, Pedro Antonio Reura por muerte; Francisco Javier Basualdo, por ladrón; Lucas Romero, por ladrón; José Pérez, por herida, Pablo, negro esclavo, por muerte; Feliciano Silva y Francisco Leyva, por muerte; Pedro Casco, por heridas; Manuel Fernández (a) el quebrado por muerte; Juan Antonio Rodríguez, José Ignacio Perulero e Ignacio Covay, por muerte; Nicolás de los Angles Feliú y Pedro Tomás Cuello, por contrabandista, José Castello, por heridas; Pedro José Flores, Pedro Pablo Denis, Juan José Leyes, Baltasar Cepeda, José Ignacio Ramírez y Domingo Rocha, por jugadores; Patricio Caco, por deuda; Juan Vicente Contreras por “amores”; Pedro Moreyra por enamorado; y José Aguirre, por andar con cuchillo y haberse resistido a la autoridad. Se pone punto a las causas civiles “hasta el lunes de la semana de Cuasimodo”.
- El Virrey, por oficio del 13 del corriente, remite para su informe, la representación que le hizo, el día 7, el Alcalde de la Hermandad de los Arroyos, exponiéndole sobre las numerosas familias cordobesas y Santiagueñas que se han poblado en aquel partido, sin licencia. Como han sido expulsadas por vagos y perniciosos, solicita auxilio para expatriarlos. Se dispone el informe, señalándose que otros tantos fueron expulsados de la costa del Salado, por orden del Cabildo. Mediante oficio del 13 del actual Antonio Barrenechea informa que no ha podido asumir como Recaudador de Arbitrios en Buenos Aires, por haberse presentado ante el Virrey, José Teodoro de Aguiar, haciendo oposición, y el expediente se halla a vista fiscal. El cuerpo difiere considerar el asunto. Por pedimento María Candelaria Loza, solicita de merced un sitio, ubicado en los extramuros, sobre la calle de la compañía al norte que linda por el sur con Feliciana Bernal y por el norte con Francisco Castillo. En atención a ser “una pobre viuda” y no tener casa propia, se le concede.
- El Presidente del cuerpo, Alcalde 1º, informa que procedió a citar a todos los electos, habiéndole respondido Manuel Ignacio Diez de Andino que se presentará dentro de unos días y que los restantes se hallan prontos para asumir, con excepción de Francisco Antonio y Ramón Fernández, y Juan de Sola que no ha respondido. Mediante pedimento, el Capitán de Blandengues Juan Francisco de Echagüe solicita certificación de sus servicios para acreditarlos ante el Virrey. El cuerpo gira el pedido al Procurador Síndico Genera. Por escrito, José de Vera, vecino de los Desmochados solicita se lo exima del empleo de Juez Pedáneo, por la pobreza en que se encuentra y su dilatada edad, haciendo presente que en caso que el cuerpo no acceda, tomará posesión luego de la decisión de la superioridad. No se hace lugar a la solicitud por no haber en aquel partido otra persona para ese cargo, advirtiéndole que su desempeño será sólo de un año. José Ignacio de Echagüe asume como Alcalde 2º. El Regidor Roldán se hace cargo, en depósito, de la cara de Alcalde 1º. Asumen sus cargos: José Miguel de Retolaza, Alcalde de la Hermandad de Coronda; José Vera, Juez Pedáneos de los Desmochados; Francisco Piedrabuena, Juez Pedáneo de Ascochingas y Miguel “Ballejos”, comisionado del partido del Rincón. Se ordena a los Comisionados tomar relación de todos los vecinos de sus partidos, y a aquellos que se reconozcan “por vagos, sin haciendas y fincas” les den plazo de 4 días para abandonar la jurisdicción.