-En razón de ser insuficiente el número de caballos que disponen losvecinos para la vaquería ordenada, se resuelve que el teniente de gobernador los adquiera en Buenos Aires, pagándose con la multa aplicada a favor de Santa Fe al ex gobernador J. de Lariz, en el juicio deresidencia, y cuya suma se destinará para la mudanza.
-El tenientede gobierno por ausencia del alcalde de primer voto A. Fernández Montiely encontrándose de partida a Buenos Aires, encarga el gobierno dela ciudad al alcalde y regidor propietario Jerónimo de Rivarola.
El capitán Francisco Luis de Cabrera, vecino de Córdoba, presenta una petición solicitando se prohíba, en la otra banda del Paraná,la recogida de los ganados pertenecientes a los herederos de doñaJerónima de Contreras, sin la expresa autorización de éstos. Se accede.
Acta del cabildo de Santa Fe del 18 de febrero de 1654 mandando quelos caballos que servirán en la vaquería, con la cual se contribuirána los gastos de traslado de la ciudad se guarden en el Rincón de Antón Martín.
Asumen como regidores Cristóbal Jiménez Figueroa, Alonso Delgadillo y Atienza y Juan Domingo Pereiro. Este último recibe el estandartey se hace cargo del oficio de alférez real.
-De acuerdo con el autodictado por el teniente de gobierno referente a la vaquería a efectuarse para ayuda de la mudanza, se resuelve que los caballos dispuestospara tal fin se reúnan para su custodia en el Rincón de Antón Martín,' atendiendo a ser más seguro y más importante', comisionándose alregidor propietario Jerónimo de Rivarola la yerra de los mismos con la marca que consigna al margen del acta. Para la guarda de la caballada son designados Antonio de Castro y Melchor Martínez.
-El procuradorsolicita la prohibición de las vaquerías en Corrientes. El tratamientodel asunto se dispone para la próxima sesión.
-Se resuelve pregonar el abasto de carne.
-Para adquirir yerba y tabaco con destino a los indios Colastinés que se han reducido, se dispone invertir 24 pesos.
Se dispone que los caballos de la ciudad, en custodia del capitán Mateo de Lencina, se trasladen a la isla de enfrente.
-Se ordena almayordomo entregar a los capitulares de las compañías la Pólvora quetiene en su poder, por la amenaza que existe de ser asaltada la ciudad por los Calchaquíes, que tres meses atrás, dieron el primer ataquea las estancias del Salado.
-El regidor Juan de Vega y Robles asume el turno de fiel ejecutor.