Se aprueba el ajuste de las rentas de la iglesia Matriz, presentadopor el alcalde J. de Aguilera y el cura vicario maestro Diego Fernándezde Ocaña. Reconociéndose 'ser cortísimos' esos recursos para repararel edificio, el cabildo toma a su cargo dichos arreglos, para lo cual comisiona a los vecinos Cristóbal Jiménez y Francisco Rodríguez, personasexpertas 'en costos de edificios', a efectos de que tasen los trabajos necesarios.
Por no poder afrontar el cabildo el gasto de 700 pesos en que tasaronel reparo de la iglesia Matriz, se resuelve arbitrar fondos aplicadosun sobre precio de 2 pesos en el vino que se expende en las pulperíasde la ciudad y del Rey, y un impuesto de un cuartillo para los vecinosy un real para los forasteros, para cada arroba de mercadería delParaguay que salga fletada para cualquier ciudad o provincia. Lodecretado se publicaría a toque de caja y se haría conocer al curavicario, gobernador y obispo. Los impuestos tendrían una vigenciade seis meses, a partir de la fecha.
Se dispone la concurrencia de las autoridades a las iglesias y conventos para presidir los oficios de Semana Santa. El alcalde Romero de Pineda portaría el estandarte real las noches del jueves y viernes santo.
Se suspenden los juicios civiles y se ordena visita de cárcel.
Se acota una real cédula, remitida por el gobernador, por la cualse ordena que las rentas de la romana se administren en la misma formaque en Asunción. Para la averiguación de esto, se comisiona al alcalde Romero de Pineda. Las actuaciones serian elevadas al gobernador.
El procurador general solicita la revocación de los impuestos sobre fletes establecidos para reparar la iglesia Matriz, en postrero díade febrero. Se accede, manteniendo el aplicado sobre los que estána cargo de los forasteros y, para obtener recursos, se dispone soicitara los vecinos un 'donativo voluntario'.