Perteneciente al 11 de Junio de 1661
El padre Pedro Rodríguez de Cabrera amplía su petición, resolviéndosetratarla en la próxima reunión. Después de haberse levantado la reunión ,se reabre el cabildo para reiterar el precio del pan, que debe hacerpúblico el fiel ejecutor. Las infracciones serían castigas con pérdida del producto en la primera ocasión y con prohibición de amasar enla segunda.